Investigadores del CIDTER instalan electrifican con sistema de paneles solares
Investigadores de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH) ponen el conocimiento al servicio de la comunidad El Tuzal, en el municipio de Cintalapa, que después de 2 décadas de creada cuenta con servicio de energía eléctrica gracias a la instalación de un sistema de paneles solares.
Con este proyecto del Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico en Energías Renovables (CIDTER), financiado con recursos del Consejo Nacional de Ciencias y Tecnología (Conacyt), Ayuntamiento de Cintalapa y Secretaria de Energía (SENER), se beneficiaron a 30 familias, que habitan a 23 kilómetros de la cabecera municipal de Cintalapa.
El rector de la UNICACH, Roberto Domínguez Castellanos acompañado del alcalde de Cintalapa, Antonio Váldez y funcionarios de la SENER, Comisión Federal de Electricidad, del programa Educar con Responsabilidad Ambiental (ERA), investigadores y alumnos de la licenciatura en Energías Renovables, constataron el buen funcionamiento del sistema de centrales solares.
Este sistema ha permitido a los habitantes de El Tuzal, una de las siete comunidades de la Red de Comunidades Solares, contar por vez primera con un refrigerador colectivo, sistema de bombeo de agua, alumbrado interior y exterior.
Luego de recorrer la comunidad y escuchar la experiencia de sus pobladores, el rector de la UNICACH elogió el trabajo de los investigadores y alumnos del CIDTER que desarrollan este proyecto, uno de los más grandes que apoya la SENER en Chiapas y el Sureste del país, para brindar el servicio de electrificación a las más de 10 mil comunidades que no lo tienen.
Agradeció la confianza que los habitantes de El Tuzal han depositado en la UNICACH, así como el apoyo del Ayuntamiento de Cintalapa, cuyo alcalde, Antonio Valdés destacó lo valioso que es “traer a la Universidad a la comunidad”.
El director del CIDTER, Joel Moreira Acosta detalló que los equipos instalados funcionan eficazmente reduciendo el tiempo y esfuerzo que dedicaban hombres y mujeres de la comunidad a tareas como acarrear agua y cortar leña, aunado a ello dotaron a las familias de estufas ecológicas que reducen el consumo de leña e impactan de forma positiva en la salud de las personas, al eliminarse la emisión de humo.
Además de que “ahora a las 11 de la noche los niños pueden hacer la tarea, es una maravilla para nosotros, antes la pila para la radio duraba tres días y se acababa, hoy ya tenemos modular y hay una tele”, relata el comisariado ejidal de El Tuzal, Francisco Ramos Vicente.
La vida útil de los paneles instalados es de unos 30 años, el grupo de expertos de la UNICACH capacitó a pobladores de El Tuzal para atender lo relacionado al mantenimiento y operación del equipo que tuvo un costo de alrededor de 1 millón 200 mil pesos. / Laura Matus