De aprobarse la iniciativa de Ley de Desarrollo Constitucional en Materia de Igualdad de Género, Chiapas pondría a la vanguardia su marco jurídico, toda vez que sería la primera ley de esta naturaleza en el país, así lo mencionó, Eduardo Ramírez Aguilar, presidente del Congreso del Estado.
Desde el municipio de Palenque, tierra de nuestros ancestros mayas, Eduardo Ramírez destacó que la presente Legislatura del Congreso Local, debe garantizar el derecho de las mujeres a participar en la vida pública y política de Chiapas, libres de violencia política y con una paridad de género efectiva.
En el marco del informe legislativo de la diputada por este Distrito, María Mayo Mendoza; Ramírez Aguilar celebró el empuje que ha dado la presidenta de la Comisión de Equidad y Género, a la presente iniciativa, la cual propone que a través de instrumentos normativos y reglametarios, se protejan a las mujeres contra la violencia política de género.
Eduardo Ramírez dijo que: nuestra población está representada por una gran mayoría de mujeres y es por ello que debemos garantizarles espacios de representación, para que influyan en las decisiones trascendentes de la vida pública, social, económica y política de Chiapas.
“Queremos que cada día hayan más mujeres agentes municipales, regidoras, presidentas municipales, diputadas, senadoras, gobernadoras y por qué no, presidentas nacionales, con su derechos políticos garantizados, lo que sin duda abona a la construcción de un estado democrático”, señaló Ramírez Aguilar.
Cabe destacar que esta iniciativa presentada por la diputada María Mayo, guarda una naturaleza incluyente, toda vez que para su elaboración también participaron activistas, académicas, defensoras de los derechos de las mujeres y líderes de opinión de nuestro estado, especialmente de la Red Chiapas por la Paridad Efectiva (REPARE).
Finalmente, Eduardo Ramírez, quien habló ante hombres y mujeres palencanas, los conovocó para que desde sus hogares fomenten una educación basada en el respeto e igualdad de condiciones entre hombres y mujeres, dejando un lado los patrones socio-culturales, que muchas veces solo fomentan la sociedades machistas.